Boletín 843
Título: DIOS LLAMA A SAMUEL
Pasaje: 1 Samuel 3:1-21
Son muchas las veces que se ha dicho que detrás de un gran hombre hay una mujer de mucho valor e influencia. Ana, la madre de Samuel, fue una mujer que pasó de una amargura profunda a disfrutar del gozo y la paz que Dios da cuando nos rendimos de todo corazón a él. Sin duda que Ana transmitió a su hijo sus experiencias y buena relación con Dios que tuvo a partir de sus votos. Fue poco el tiempo que lo tuvo bajo su cuidado, pero fueron más que suficientes para hacer la tarea de madre piadosa.
El capítulo 3 del primer libro de Samuel nos muestra como Samuel estaba completamente entregado al servicio del Señor en la casa de Jehová en una época en la cual reinaba la apostasía. Cada uno hacía lo que bien le parecía, además de la falta de visión espiritual y casi que ningún temor por las cosas sagradas de parte de aquellos que estaban en la posición eclesiástica más importante y de quienes se esperaba la luz. Es en medio de esas circunstancias que Dios llama a Samuel, un principiante y con poco discernimiento, tanto que, que confundía la voz de Dios con la de Eli el sacerdote. Jehová lo llama para que sea el mediador y transmisor de la Palabra de Dios delante de su pueblo de Israel, ya que el liderazgo y el pueblo estaban pasando quizá por uno de los peores momentos de Israel.
Hoy día vivimos momentos difíciles como la iglesia de Cristo, son innumerables las iglesias que le están dando la espalda a la sana doctrina, hombres que han sido arrastrados por la sociedad inmoral actual. Vemos a líderes de iglesias locales cayendo en pecados aún peores que los que practicaban los hijos de Eli. Todas estas cosas nos muestran un panorama oscuro. Pero así como Dios llamó a Samuel antes de que se apagara la Lámpara de Dios, me llama y te llama para que tomemos la bandera del evangelio y lo vivamos de manera digna dentro y fuera de las paredes de nuestra iglesia local.
Recordemos que Dios busca hombres y mujeres hoy que se paren en la brecha, pregunten cual es el camino y andemos por el.
TEXTO PARA MEDITAR
“El joven Samuel ministraba a Jehová en presencia de Elí; y la palabra de Jehová escaseaba en aquellos días; no había visión con frecuencia” —1 Sam 3:1
DEVOCIONAL:
Lunes. 1 Sam 3:1-9.
En aquel tiempo era raro oír la palabra de Dios, y las visiones no eran frecuentes. ¿Por qué crees que Israel estaba pasando por esa circunstancia y quienes eran los responsables de ella?
Martes. 1 Sam 3:1-9.
Observa el papel de Eli, cuando Dios llama a Samuel. ¿Qué enseñanzas te deja este líder espiritual en este pasaje?
Miércoles. 1 Sam 3:10-21.
Observa en este párrafo a Samuel y subraya las cosas positivas de él y dignas de imitar, compártelas con tu familia.
Jueves. 1 Sam 3:10-21.
Anota en tu boletín físico las enseñanzas más importantes que te deja Dios al llamar a Samuel.
Viernes. 1 Sam 3:10-21.
Dios llamó a Samuel para su servicio en un momento difícil del pueblo. Según el verso 21, ¿por qué crees que Dios volvió a aparecer y se manifestó a Samuel? ¿Crees que Dios te está llamando a ti también?