Boletín 898
Título: LA TRISTEZA QUE LLEVA AL ARREPENTIMIENTO
Pasaje: 2 Corintios 7:2-16
La práctica del amor cristiano requiere constantemente el ejercicio de la corrección, amonestación o disciplina. Esto se puede ver tanto dentro de la iglesia como en el hogar. Este ejercicio tiene como objetivo la restauración de las personas en su comunión con Dios y con los demás creyentes. En 2ª Corintios capítulo 7 nos damos cuenta de la forma en que Pablo se regocija grandemente por el arrepentimiento genuino que hubo en estos creyentes luego de haberlos exhortado fuertemente con una carta que les había enviado.
Después que se ha sido disciplinado o corregido bien sea por Dios u otro hermano, se experimenta en principio una sensación de tristeza que luego lleva a tener un arrepentimiento de corazón. ¿Cómo se debe administrar la corrección con el fin de restaurar? ¿Cuáles son sus efectos?
1. Mantener una actitud amorosa y no de juez o víctima (V. 2-6)
Pablo les manifestó a los corintios que su objetivo no era causarles daño, como sí lo hacían algunos falsos apóstoles en la congregación. El propósito era restaurarles. A pesar de que Pablo estaba pasando por tribulaciones, no se hizo la víctima ni les reprochó que no tuvieran ellos consideración por su situación.
2. El objetivo no es causar dolor, aunque el proceso lo genera (V.7-9)
Tanto Pablo como los corintios se dolieron por sufrir o administrar la disciplina. Y es algo normal, ya que ninguna disciplina es causa de gozo sino de tristeza (He 12:11). No hay restauración cuando durante la corrección se quiere, más que restaurar, avergonzar o descargar la ira sobre las personas para causarles daño. Esto lleva más bien al resentimiento.
3. La corrección bien aplicada lleva al arrepentimiento y restauración de relaciones (V. 10-16)
Los corintios tuvieron un cambio de dirección para corregir o enmendar su error. Al final Pablo y Tito se sienten orgullosos de ellos, sin hacerles ningún reproche.
TEXTO PARA MEDITAR
” Porque la tristeza que es según Dios produce arrepentimiento para salvación, de que no hay que arrepentirse; pero la tristeza del mundo produce muerte.” —2Co.7:10
DEVOCIONAL:
Lunes: 2 Corintios 7:2-6
¿Cuál debe ser nuestra actitud a la hora de corregir, amonestar o disciplinar a otros, sea en el hogar o la iglesia?
Martes: 2 Corintios 7:7-9
¿Qué propósito tenía Pablo con su amonestación a los corintios?. En un principio, ¿qué efecto tuvo esa amonestación? Ver He.12.11 y Pr.27:5-6. ¿Qué errores se cometen muchas veces al corregir a otra persona y qué se produce?
Miércoles: 2 Corintios 7:10
¿Qué es y qué produce la tristeza según Dios y lo que es según el mundo? ¿Cuál es la diferencia entre remordimiento y arrepentimiento?
Jueves: 2 Corintios 7:11
¿Qué pruebas vemos aquí de un arrepentimiento genuino?
Viernes: 2 Corintios 7:12-16
¿Cómo ha de ser nuestra actitud y forma de proceder con un creyente que ha sido restaurado?
