Boletín 912
Título: EN EL VIENTRE DEL PEZ
Pasaje: Jon.1:17-2:9
Dios se vale de muchas cosas para moldear la vida de un creyente, de eso no hay duda, y menos luego de leer que escogió a un pez para tratar la desobediencia de un hombre. ¿Qué se siente estar vivo dentro de un pez por tres días? ¿Qué se siente estar inmerso en la peor de las circunstancias de la vida por desobedecer a Dios? Jonás sintió que la muerte respiraba a sus espaldas, indudablemente tuvo temor, también se sintió desechado por Dios, sin oportunidad de ver la luz del día nuevamente y lleno de mucha angustia. ¡Cuánto cuesta desobedecer a Dios!
Cuan similar puede ser esta escena de Jonás dentro del vientre del pez a los momentos que usted ha vivido rodeado de angustia, temor, y hasta pensando que Dios le ha desechado, sintiendo que ya todo ha terminado por no obedecer a la voz del Señor.
Cuando escogemos hacer nuestra voluntad por encima del plan de Dios estamos abandonando la misericordia del Señor por ir tras cosas vanas. Si desechamos la voluntad de Dios para nuestra vida, tomando el barco equivocado y cerrando el corazón al lanzarnos al mar de nuestras decisiones, solo obtendremos la disciplina de Dios.
Sin embargo, cuando Dios nos mete en profunda angustia es para recordarnos cuánto le necesitamos, es un verdadero ejercicio de amor hacia nosotros, pues es allí cuando surge el clamor genuino del verdadero creyente arrepentido y necesitado de la gracia de Dios.
Lo asombroso de toda esta historia, es que Dios no desechó a Jonás a pesar de que él sí había dicho no a Dios en días pasados. La gracia y el plan de Dios con cada hijo suyo no cambian según las circunstancias, Dios tiene el control de todo y se valdrá de cualquier cosa para cumplir su propósito en nosotros.
Cuando Dios trata con nuestra desobediencia no hay otro camino más que el arrepentimiento, la humillación y la oración en ruego y suplica. De todo esto aprendemos que nada vale más que obedecer a Dios, que su misericordia es más importante que cualquier objeto banal de este mundo, que es más sabio cumplir el llamado de Dios que escoger satisfacer nuestros deseos y razonamientos.
TEXTO PARA MEDITAR
“Los que siguen vanidades ilusorias, Su misericordia abandonan” —Jo.2:8
DEVOCIONAL:
Lunes Jonás 1:17
¿Se puede salir una situación de las manos de Dios? ¿Por qué escogemos hacer nuestra voluntad y no la de Dios muchas veces?
Martes Jonás 2:1-9
¿Cómo se sentía Jonás dentro de vientre del pez? ¿Qué hizo Jonás? ¿Qué enseñanza le deja el versículo 7? ¿Por qué Jonás no oró así cuando comenzó la tormenta?
Miércoles Jonás 2:1-9
¿Cómo respondió Dios a la oración de Jonás? ¿Qué aprendes del carácter de Dios en estos versículos?
Jueves Jonás 2: 4 y 7
¿Qué significa el “santo templo” en estos versículos? ¿Jonás dio por hecho que moriría en el pez? ¿Ha estado en una situación sin salida? En momentos así ¿qué debemos hacer?
Viernes Jonás 2:8-9
¿Cuál es la gran lección que aprendió Jonás? ¿Esperó Dios a que Jonás aprendiera la lección para sacarlo del pez?
