Boletín 953
La historia de David y su familia nos ha mostrado a un padre que no se interesaba en los asuntos de sus hijos y además que no los disciplinaba, lo cual llevó a esos jóvenes a la rebelión, violencia, ocio y traición. No obstante, Dios como Padre responsable, siempre está interesado en que sus hijos anden en la verdad, más allá de que no sufran, por esto Dios disciplina con tanta severidad, así como con mucha misericordia también.
He.12:7 “Si soportáis la disciplina, Dios os trata como a hijos; porque ¿qué hijo es aquel a quien el padre no disciplina?”
Seguramente fue muy difícil para David huir de su propio hijo Absalón, así como ver que su propio consejero personal Ahitofel se alió con él. Al pasar por la disciplina de Dios, observamos como a David le salen al encuentro personas con diferentes intenciones. Es así como Siba, el siervo de Mefi-boset, al ver la oportunidad, quiere sacar provecho de la situación, no ayudando a David sinceramente, sino buscando que se le devolvieran las tierras que había dado a Mefi-boset. Asimismo, Simei pariente de Saúl, juzga la situación como algo que David tenía bien merecido.
No obstante, aún en medio de esta situación, la misericordia de Dios se hace evidente al poner personas que ayudaran a David de manera sincera. Por ejemplo, Mefi-Boset quien le ayuda con provisiones. También Husai arquita, quien es nombrado varias veces como el amigo de David, y arriesgaría la vida al convertirse en un infiltrado en la corte de Absalón.
Algo que aprendemos de la actitud de David es a sufrir la afrenta, permanecer callado y soportar la disciplina de Dios con humildad.
Lamentaciones 3:28-32
“Que se siente solo y calle, porque es Dios quien se lo impuso;
Ponga su boca en el polvo, por si aún hay esperanza;
Dé la mejilla al que le hiere, y sea colmado de afrentas.
Porque el Señor no desecha para siempre;
Antes si aflige, también se compadece según la multitud de sus misericordias;”
…Dejadle que maldiga, pues Jehová se lo ha dicho. Quizá mirará Jehová mi aflicción, y me dará Jehová bien por sus maldiciones de hoy. —2 Samuel 16:11b-12
DEVOCIONAL
Lunes. 2 Samuel 16:1-4
¿Quiénes eran Siba y Mefi-boset? ¿Por qué cree que Siba está dando estos regalos a David? Ver 2 Samuel 9 y 19:24-30. ¿Qué tan fácil es juzgar por las apariencias? Ver Juan 7:24.
Martes. 2 Samuel 16:5-14
¿Qué opina de lo que dice Simei? ¿Estaba David sufriendo por la causa que dice Simei? ¿Cómo debemos reaccionar ante la maledicencia y el prejuicio?
Miércoles. 2 Samuel 16:15-19
¿Quién era Husai? ¿Cómo ayudó a David? Analice el valor de una verdadera amistad y de la lealtad. ¿Cuándo es correcto no decir la verdad?
Jueves. 2 Samuel 16:20-23
¿Qué opina del consejo de Ahitofel? ¿Qué debemos evitar cuando somos consejeros?
Viernes. 2 Samuel 16:1-23
¿Qué enseñanzas le dejó todo el capítulo?