Boletín 643
Título: LA SABIDURÍA DE DIOS REVELADA
Pasaje: 1 CORINTIOS 2:1-8
“Entre los antiguos griegos (los misterios) eran ritos religiosos y ceremonias que se practicaban en el seno de sociedades secretas en las que podía ser recibido aquel que lo deseaba. Los que eran iniciados en estos (misterios) venían a ser poseedores de un cierto conocimiento que no se impartía a los no iniciados, y por esto recibían el nombre de (los perfeccionados).” Dic. VINE Pag. 562.
En el capítulo 2 de la carta a los Corintios el apóstol Pablo presenta el evangelio como un misterio o como una sabiduría oculta. Esta sabiduría es la verdad revelada de Dios, aquello que solo puede entenderse por intervención divina y no por razonamientos humanos. (Ver Mt. 16:17)
En su programa eterno de salvación Dios estableció revelar el evangelio en la persona de Jesucristo en nuestra era. Los profetas indagaron con gran diligencia acerca de la salvación que a nosotros nos ha sido dada, ellos escudriñaron qué persona y qué tiempo eran los fijados por Dios, pero nunca lo supieron. (Ver 1 P. 1:10–12)
Ahora nosotros, no siendo muchos sabios ni grandes intérpretes de los tiempos de Dios, hemos venido a ser los privilegiados en conocer a la persona de Cristo, expuesto ante nosotros mediante el evangelio eterno de Dios.
A diferencia de los llamados (perfeccionados) en el mundo griego, nosotros somos los que han alcanzado la verdadera madurez (perfección) al comprender por el Espíritu la sabiduría de Dios, esa que estuvo oculta ante muchos en el pasado, a Jesucristo, exhibido en la cruz, muerto, sepultado y resucitado.
¿Quiénes éramos para que Dios se complaciera en revelarse a nuestra generación tan depravada mediante sí mismo en la cruz? Dios había destinado desde antes de fundar la tierra y todo lo que hay, revelarse en este tiempo a nosotros por el Hijo.
Esta es la sabiduría de Dios que deslumbra al pecador que se postra ante la cruz. El verdadero hombre maduro (perfecto) no es a aquel que se envanece en su conocimiento, sino aquel que cree en Jesús como el salvador y se postra ante Él; el tal ha hallado la sabiduría y el poder de Dios.
PREGUNTAS
Lunes: 1 Corintios 2:1-4
¿Cuál es el testimonio de Dios? ¿Cómo recibió usted el testimonio de Dios? ¿Cómo debe exponer a otros el testimonio de Dios?
Martes: 1 Corintios 2:5
¿En qué se basa su fe, en lo que sabe de Dios o en el poder de Dios? ¿Qué tan seguro estás de tu salvación? ¿Hay duda en tu vida acerca de si Dios tiene poder para salvar? ¿Nuestra fe depende de lo que sabemos acerca de Dios o del poder de Dios?
Miércoles: 1 Corintios 2:1-8
Escribe algo que no hayas entendido de estos versículos y pregúntalo en el grupo de estudio
Jueves: 1 Corintios 2:6-7
¿A qué sabiduría se refiere el pasaje? ¿Quiénes han alcanzado madurez? ¿Qué impide que seamos más maduros? Ver 1 Co. 3:1–4. Establece las diferencias que hay entre la sabiduría de este sigo y la de Dios.
Viernes: 1 Corintios 2:7-8
¿Qué quiere decir la palabra misterio? ¿Por qué se habla de una sabiduría oculta en el pasaje? ¿Cuándo fue revelada la sabiduría de la que habla el pasaje? ¿Cuándo y cómo se te reveló a ti?
