Boletín 830
Título: EL CAMINO DE LA SANTIFICACIÓN
Pasaje: 1 Tesalonicenses 5:12-28
La convivencia con otros creyentes no es fácil, pero es una de las maneras en que Dios nos ayuda a conformarnos al carácter de Cristo. Este es parte del camino de la santificación práctica del creyente. La iglesia del Señor está conformada por personas con diferentes problemáticas y necesidades particulares. A pesar que la iglesia en Tesalónica es considerada la iglesia modelo, observamos, según la exhortación de Pablo, que había algunas cosas que requerían corrección. Por ejemplo, aspectos de comportamiento, de moral, de orden y laboriosidad que vimos en el capítulo 4. Es un consuelo para nosotros, saber que los hermanos en Tesalónica tenían estas mismas dificultades que tenemos hoy en día en la iglesia local.
En el pasaje 1 Ts 5:12-15, en primer lugar, vemos un llamado a tener mucha estima y amor por los líderes de la congregación debido al trabajo arduo que realizan, así como por la dirección espiritual del rebaño (V. 12-13). Observamos también varios grupos de creyentes que requieren nuestra ayuda. Los ociosos o perezosos, a quienes es necesario exhortar a trabajar. A los de poco ánimo o tímidos hay que alentarlos. Los débiles en la fe son los que están en las primeras etapas de su desarrollo espiritual y a ellos hay que cuidar con ternura.
Tres cosas que debemos hacer siempre y están entrelazadas son: el permanecer gozosos, orar en toda circunstancia y dar gracias por toda situación, sabiendo que a los que aman a Dios todas las cosas ayudan a bien (Ro 8:28).
La meta final del creyente es la santificación completa. Esto será posible cuando Cristo regrese por su iglesia y seamos transformados a la misma imagen de Cristo. Tendremos un cuerpo incorruptible que también será incapaz de pecar, una mente perfecta con conocimiento pleno así como voluntad y emociones en línea con la voluntad de Dios. ¡Qué destino tan maravilloso nos espera!
TEXTO PARA MEDITAR
“Y el mismo Dios de paz os santifique por completo; y todo vuestro ser, espíritu, alma y cuerpo, sea guardado irreprensible para la venida de nuestro Señor Jesucristo” —1 Ts 5:23
DEVOCIONAL:
Lunes. 1 Tesalonicenses 5:12-13
¿A quienes se está refiriendo aquí?, ¿qué labores ejercen? ¿Qué significa reconocer y tener en mucha estima y amor? ¿De manera práctica, cómo logramos tener paz entre nosotros y con los líderes?
Martes. 1 Tesalonicenses 5:14-15
¿Qué grupos de personas identificamos aquí y cómo debemos proceder con cada uno de ellos?
Miércoles. 1 Tesalonicenses 5:16-18
¿Cómo nos ayudan estas tres “herramientas” a sobrellevar las dificultades de la vida?
Jueves. 1 Tesalonicenses 5:19-22
¿Cómo hacer para no apagar el Espíritu? ¿Qué cosa no debemos menospreciar y que debemos examinar y retener? ¿De qué cosas debemos abstenernos? ¿Cómo lo logramos?
Viernes. 1 Tesalonicenses 5:23-28
¿En qué consiste la esperanza del creyente? ¿Cómo nos debemos animar y edificar? ¿Por qué es imprescindible hacerlo?¿Por qué se le llama el Dios de paz? ¿Cuándo ocurrirá la santificación completa del creyente? ¿Cuál es la diferencia entre el alma y el espíritu? Analice las instrucciones finales de la epístola y obtenga una aplicación para los creyentes de hoy.
