Boletín 947

Fueron muchas las hazañas por las que el rey David pasó en su vida y Dios le dio la victoria en sus enfrentamientos con todos aquellos enemigos de Israel, y no solo eso sino que pudo extender su reino. También puso guarniciones en cada lugar conquistado como medida preventiva contra sus enemigos. Sin embargo, el rey David ignoró que su peor enemigo era su propio yo, de quien no debía confiarse. No obstante, fue de ese enemigo de quien recibió la peor de sus derrotas y además le trajo las peores consecuencias no solo a él sino a su familia y aquellos a los que gobernaba.

David fue pasando de un abismo a otro sin darse cuenta, y no fue suficiente que su siervo Urias se le negara a atender su pedido de que se acostara con su mujer Betsabe, lo cual era una clara advertencia para que se detuviera en locura. Pero ya el pecado habia tomado suficiente ventaja y fue yendo de un mal a otro peor, al punto de llegar a ser el autor intelectual de un asesinato.

Nos podemos preguntar: 

¿Cómo fue posible que David cometiera estos pecados? ¿Podía David haber evitado caer? ¿Por qué Dios se lo permitió?

Algo claro que sabemos es que Dios no se agrada de que sus hijos lleguen a semejantes  condiciones de perversidad. Lo que Dios ha hecho es proporcionarnos advertencias en su palabra, y si las atendemos, seremos librados del mal. Estas advertencias fueron ignoradas por David durante muchos años y el resultado de todo ello es haber llegado a la hora más oscura de toda su vida.

Este episodio de la vida de David nos muestra de manera clara el hecho de que cuando damos cabida al pecado en nueras vida se puede llegar a hechos vergonzosos y repudiables, los cuales se convertirán en manchas imborrables.

Texto para meditar. 

“Y pasado el luto, envió a David y la trajo a su casa; y fue ella su mujer, y le dio a luz un hijo. Mas esto que David había hecho, fue desagradable ante los ojos de Jehová.” —2 Samuel 11:27

DEVOCIONAL

Lunes 2 Samuel 11:6-27

¿Qué aprende usted de David en este pasaje? ¿Por qué cree que David no se detuvo y tomó tiempo para reflexionar?

Martes 2 Samuel 11:6-27

¿Cuál cree usted que es la enseñanza que nos quiere dar el Espíritu Santo en este capítulo?

Miércoles 2 Samuel 11:6-27

¿Qué aprende de la vida de Urias y de Joab  en este capítulo?

Jueves 2 Samuel 11:6-27

¿Qué aprende de Dios en este capítulo?

Viernes 2 Samuel 11:6-27

Comparta con su familia las lecciones espirituales que usted observa en este capítulo.